Los reclamos de los domiciliados en torno a la estructura que ya comenzó a levantarse para recibir al equipo, lograron el apoyo de la sociedad de fomento del barrio, que preside el ex concejal del GEN, Alejandro Estupiñán.
Una de las primeras acciones fue una reunión informativa en la sede de la entidad vecinalista, ubicada en Montevideo y Avellaneda; y a ella se suman una serie de gestiones para establecer el impacto de la colocación del equipo, y los potenciales riesgos sobre la salud que los vecinos temen que pueda acarrear.
La abogada Isabel Ditrich representa a los vecinos de Villa Vatteone. En dialogo con Mi Ciudad, la letrada indicó que se están realizando distintas averiguaciones para conocer no solo las características del transformador a colocarse, sino también las implicancias sanitarias que pudiera acarrear.
«El objetivo es hacer una presentación legal para frenar la colocación del equipo, pero para eso tenemos que tener pruebas que nos permitan demostrar que existe un peligro inminente y que el perjuicio es irreversible», señalo la abogada.
De la misma manera, Ditrich dijo que «estamos contactando a vecinos de otras zonas que viven en las inmediaciones de transformadores, y donde se han registrado inusualmente elevados índices de afección de cáncer».
Para la mujer, otro de los interrogantes está dado por el líquido refrigerante que emplee el equipo a colocarse. «Nosotros no sabemos si tienen o no pcb, que es una sustancia altamente cancerígena, y que está prohibido usarse en nuestro país».
«Suponemos que a partir de la legislación vigente (que indicaba que no podía emplearse en los transformadores a partir de 2010), no debería contenerlo, pero hay indicios de que hay lugares en los que se sigue usando y nunca se cumplió con el recambio previsto por la normativa vigente».
Cables
Otro de los temas sobre los que llamó la atención la abogada es la presencia de cables del tendido de alta tensión que cruzan Villa Vatteone en las calles 12 de Octubre, 3 de Febrero y Chaco.
Respecto a esto también hay legislación, que indica que este tipo de tendidos, al igual que los transformadores, no pueden estar ubicados en zonas urbanas, y que por las ondas electromagnéticas que emiten, constituyen un riesgo potencial para la salud de quienes viven bajo ellos, o en sus inmediaciones».
En una reunión que tuvo lugar el 18 de mayo último en la sociedad de fomento, los vecinos no solo rechazaron la colocación del transformador, sino que plantearon la existencia de fábricas en la zona, la de la antena de celulares ubicada en Eva Perón y 3 de Febrero, y la subestación eléctrica de 3 de Febrero y Juramento, a la que además llegan los cables de alta tensión.
Versiones encontradas
Estupiñán explicó a Mi Ciudad que «a los vecinos les dieron dos versiones completamente diferentes sobre los motivos de la instalación del transformador».
Una de ellos daba cuenta que estaba destinado a alimentar con mayor flujo de energía al Hospital Mi Pueblo, mientras que por otro lado se indicó que el objetivo era aumentar la provisión para una de las empresas ubicadas en la zona, y respecto de cuya presencia, los vecinos también tienen inquietudes respecto a su impacto en la salud y el ambiente.
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