Érica Leguiza, identificadora del Hospital “Mi Pueblo”

La dactiloscopia cumple un rol importante dentro del sector de la salud, ya que permite que cada persona pueda resguardar su identidad. Por ello, el Hospital Mi Pueblo organiza junto a su equipo de identificadores dactiloscópicos una jornada para concientizar sobre la importancia de esta labor.
El 1° de septiembre, cuando se conmemora a nivel mundial el día de la Dactiloscopia, en honor al perito argentino Juan Vucetich, se llevará a cabo un evento dentro del Hospital Mi Pueblo, con el fin de visibilizar y concientizar no solo a la gente sino también al personal de salud sobre la importancia de los identificadores dactiloscópicos en la sociedad. "Realizaremos una volanteada en el área de maternidad del hospital, donde además informaremos sobre nuestro trabajo y el beneficio que este tiene para la comunidad", comentó Érica Leguiza, enfermera e identificadora del centro asistencial a Mi Ciudad.
Si bien, desde el año pasado el sector Salud fue duramente golpeado por la pandemia, Érica, junto a su equipo, debió darse a la tarea de resguardar las identidades tanto de los recién nacidos como de los fallecidos. "Trabajamos en las dos instancias donde el ser humano está más vulnerable, en el nacimiento y la muerte, en ambos casos el individuo puede expresarse para cuidar su identidad", dijo.
Durante todo el año pasado este espacio tuvo que trabajar arduamente, inclusive tuvo que reemplazar al Registro Civil, que durante 17 meses estuvo sin funcionar. "Dentro del hospital tenemos una maternidad muy grande que no se resguardó, tuvimos 4900 nacimientos el año pasado y por lo visto pensaron que nunca más íbamos a hacer partos, por lo tanto no se elaboró ningún protocolo, todo surgió a pulmón", afirma Érica y añadió: "Por eso, tuve que tomar la iniciativa y darme a la tarea, de que todos los chicos que nacieron durante la pandemia pudieran acceder a su documento de identidad".
Más allá del contexto, debían lidiar con la falta de personal en esa área, puesto que hasta el momento solo cuentan con tres personas dentro de lo formal y otras tres de manera informal. "Entre las mayores dificultades que tuvimos que afrontar fue, por un lado la falta de recurso humano y por el otro la falta de presupuesto de un espacio que deberíamos tener dentro del sistema de salud", comentó Leguiza y agregó: "Contamos con un proyecto que hemos presentado, pero nunca prosiguió y eso que estamos amparados por la ley y hasta contamos con un decreto, pero nos dicen que no hay presupuesto".
En nuestro país existe un protocolo de identificación para los recién nacidos, que está determinado en la ley Nacional 24.540, publicada en el boletín oficial el 22 de septiembre de 1995. En éste, que tiene párrafos agregados por la ley 24.884, queda claramente expresado cómo debe llevarse adelante la identificación de un bebé durante el parto, además de ser un derecho de los niños tener su identidad, de ser identificados de manera correcta según la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia o (Unicef) con la convención de los derechos del niño.
Nuestro distrito cuenta con uno de los pocos hospitales que tiene este servicio de identificación, desde la técnica de la dactiloscopia, la cual no se puede adulterar. "Nosotros trabajamos mucho en el binomio madre-hijo, porque cuando un bebé nace se le toman la las huellas, la clásica patita del bebé que va en la libreta y mucha gente no sabe o ignora la importancia de esta", comentó y sumó: "Las madres tienen que saber lo importante que es identificar a su bebé apenas nace y principalmente el equipo de salud".
"Muchas veces las madres nos preguntan por qué les sacamos tantas veces las huellas a los bebés y la respuesta es simple: para proteger la identidad del recién nacido, porque nosotros a los niños les tomamos cuatro juegos de huellas", explicó y añadió: "gracias a eso, en caso de que el niño se extravíe, nosotros lo podemos identificar usando una lupa, la madre con tener la huella en la libreta vamos a poder enterarnos más fácilmente, si se encuentra a un chico con las mismas características que el que se extravió, asegurarnos de que ese niño es el que está perdido".
Este trabajo también se realiza en las defunciones, considerando que durante el año pasado los hospitales y las morgues tuvieron que trabajar sin descanso. "Tenemos que tener en cuenta que los médicos no saben cómo tomar las huellas para hacer los certificados, ahí está la preocupación de quién le toma la huella, porque en la mayoría de los hospitales no hay herramientas y esa labor recae en el personal de salud", dijo y agregó: "Hace 12 años que funciona el servicio, nosotros somos los que mejor resguardamos la identidad y trabajamos muy a la par del Registro Civil".
"Cuando uno pasa la puerta del hospital deja de ser seguramente quién es, porque el equipo de salud nunca te va a tratar con tu nombre y apellido, siempre uno es la patología con la que llega o el número de cama donde está internado; entonces como la identidad de la persona está vulnerada nosotros tenemos que resguardarla en todo momento", explicó Érica.