Por Alejandro César Suárez | @alecesarsuarez
Silencio atroz. El Municipio no dio explicación alguna por la denuncia sobre la existencia de falsos médicos en el SAME de Florencio Varela.
Silencio atroz. El Municipio no dio explicación alguna por la denuncia sobre la existencia de falsos médicos en el SAME de Florencio Varela. La nota, que fue tapa de la última edición de Mi Ciudad, fue replicada por varios medios zonales y nacionales y el hecho está siendo investigado por la Justicia, pero ningún funcionario local se refirió al tema, pese a su gravedad. Sin embargo, el bloque de concejales de Juntos presentó un pedido de interpelación al Secretario de Salud, Ruben Trepichio, quien debería concurrir a informar sobre el tema al Concejo Deliberante. La solicitud está firmada por los ediles Marcela Ochs y Mario Kanashiro.
La gravísima denuncia fue realizada por el licenciado en Enfermería y docente de la UNAJ Eduardo Arellano, en la Fiscalía N°5 de nuestro distrito y en la Defensoría del Pueblo de la Provincia de Buenos Aires. El profesional, con más de 25 años de experiencia en servicios de emergencia en ambulancia, sostuvo a nuestro medio que durante los últimos meses, quienes concurrían a los hogares varelenses a bordo de las ambulancias del SAME no fueron médicos ni enfermeros, sino «técnicos en emergencias y desastres». «En la pandemia colaboraron haciendo hisopados o entregando elementos a la gente, pero en estos casos estaban atendiendo la emergencia, solos, sin supervisión de nadie, violando leyes nacionales», declaró Arellano. Luego agregó: «Una ambulancia atiende unas diez emergencias diarias, por lo menos. Así que en estos meses, atendieron a cientos de personas. Niños, embarazadas, adultos mayores… Lamentablemente el usuario no se da cuenta. Entran a tu casa dos personas vestidas con ropa hospitalaria, un chaleco, te medican, te llevan, y vos no sabés quiénes son».
La mandaron al psiquiatra y tenía un tumor
Un empleado del área de Salud municipal cuya identidad reservamos por razones obvias explicó a Mi Ciudad quiénes son estos «técnicos»: «son egresados de una carrera inventada en la UNAJ, que duraba dos años y medio y ahora dura tres, a los cuales cuando ingresaban les decían que los iban a formar como paramédicos y que en Argentina se estaba haciendo una nueva legislación para que ellos pasaran a cumplir el rol del médico. Ya debe haber siete u ocho promociones de la carrera. Esos chicos reciben una formación mínima en lo que es oxigenoterapia y un poco de farmacología, pero claramente no pueden realizar nada invasivo. Ni colocar inyectables ni colocar una vía. Inclusive, tampoco deberían dar oxigenoterapia, que es la mascarilla con oxígeno. Cuando surgió la Pandemia estos chicos pasaron a cumplir un rol en todos los sistemas de emergencia. Acá había un interés especial de quienes crearon la carrera, que son Martín Zimerman y Arnaldo Medina, de darle una salida laboral a algo que no la tenía. Ellos en realidad son instructores de RCP básico y avanzado, y supuestamente adquieren la capacidad de realizar un triage por telefónico o por consulta verbal. En realidad, la carrera es para ser despachadores de emergencias, no para estar a bordo de una ambulancia. Pero se desvirtuó con la Pandemia. Algunos municipios empezaron a corregir eso, porque puede haber un problema legal. Cuando una persona recibe atención de alguien que viene con un uniforme del SAME calcula que se trata de un médico, no pensás que son enfermeros o técnicos de emergencias…». El testimonio suma un caso que merecería ser investigado: «hasta murió una chica que vivía en Mayol. Una técnica en emergencias le había dicho que el test de hisopado le había dado negativo, y la mandó a que después de diez días de aislación fuera a hacerse una consulta psiquiátrica. Pero a las cuatro horas ingresó al Hospital Mi Pueblo, tenía un tumor cerebral que nunca le habían detectado, la trasladaron al Hospital El Cruce y 48 horas después, falleció».
De bailarinas y otras yerbas
Otro trabajador de la Salud de la Comuna sumó un dato interesante: «esta carrera fue promovida por gente de la UNAJ y un grupo de técnicos que quería conseguir cargos políticos. Una chica que tardó ocho años para recibirse en una carrera que era de dos años y medio actualmente es Subdirectora de Formación y Capacitación. Y en su vida se subió a una ambulancia. Cobra un sueldo de subdirectora sin tener una licenciatura ni una Maestría, y su mérito fue ser bailarina de la comparsa Piripipí», aseguró.
Según Mi Ciudad pudo averiguar, en una visita a nuestro distrito, el Director Provincial del SAME explicó que F. Varela había recibido 12 móviles del sistema público provincial, mientras que lo que figuraba es que nuestra ciudad tenía entre siete u ocho móviles operativos diarios, es decir, los que están en la vía pública. En F. Varela hay cinco bases: la Central, sobre la calle Lavalle, la del Kilómetro 26, que funciona en el Centro de Salud, la de Bosques, Carolina-Ingeniero Allan y La Capilla. Fuentes bien informadas aseguran que no todas esas bases están cubiertas con médicos, sino que muchas veces lo hacen enfermeros. Esto ocurre porque muchos médicos rechazan los bajos sueldos, y otros, que son de reemplazo, no quieren ser incorporados a la planta porque pasarían a ganar un 60 por ciento menos.
Pedido de interpelación
El proyecto presentado por el bloque opositor en el Concejo se refiere a la denuncia de Mi Ciudad y otros temas que afectan al área de Salud. Dice: «visto la falta de respuesta a un pedido de informes al Departamento Ejecutivo ingresado en el Honorable Concejo Deliberante en el mes de abril del año 2022 referido a la carencia de profesionales médicos en los Centros de Atención Primaria del distrito, seguido por otro proyecto en el mismo mes solicitando la entrega de uniformes al personal municipal en especial al personal de salud, y la posterior aparición en los medios locales de comunicación respecto a denuncias efectuadas por entidades sindicales (CICOP) respecto a la precariedad en los sectores sanitarios y la situación por demás grave, por tratarse de una posible violación de la Ley Nº 17132/1967 y la Resolución Ministerial de Salud Nacional Nº 749/2000, consignada en otro medio de prensa local sobre falsos médicos en el servicio de urgencias médicas SAME de nuestro municipio y considerando Que la falta de respuesta por parte del Departamento Ejecutivo a un pedido de informes emitido por un representante electo en su figura de Concejal es considerada una FALTA GRAVE en la Ley Orgánica de las Municipalidades, Decreto Ley 6769/1958, Artículo 108, Inc 7… Se solicita expresar desde éste cuerpo legislativo la necesidad que desde el Departamento Ejecutivo Municipal se transmita al titular de la Secretaría de Salud, Dr. Ruben Alejandro Trepichio la citación a comparecer ante los Concejales de los diferentes bloques que integran el cuerpo deliberativo a los fines de ser interpelado respecto a los temas detallados en el Visto y Considerandos de la presente».
Más casos
Pese al silencio del Intendente y de muchos supuestos «opositores», el Facebook de Mi Ciudad recogió varios testimonios sobre esta grave cuestión. Entre ellos, el de una vecina que aseguró: «yo tuve un problema de 25 de presión y no quisieron hacerme el traslado al Hospital. Me llevó mi hijo al Hospital Italiano de La Plata. Era un leve ACV». Por su parte, otro vecino dijo: «nosotros llamamos una ambulancia y vino con un enfermero». Y otro: «a mi vieja un tipo del SAME le dijo que tenía presión normal y tenía 22 de presión».
Además, se expresaron estudiantes de la carrera: «Soy estudiante de la Tecnicatura en Emergencias Sanitarias y conozco estudiantes muchos compañeros que trabajan para el SAME. Es una carrera hermosa pero de mi parte si me ofrecieran ese trabajo siendo estudiante no lo aceptaría. En primer año hay una materia que se llama Transporte Sanitario, entonces desde entrada estamos capacitados para subir a una ambulancia o helicóptero, las prácticas también empiezan en primer año y debemos usar ambo pero con un carnet que nos identifique como estudiantes... Siempre que haya un técnico en una ambulancia debe ir un médico. Esas personas van a ir presas y es lo que se merecen», escribió una alumna de la UNAJ. Y otra manifestó: «Yo estuve en esa carrera desde 2017. Todos sabemos quiénes son y a quienes les ofrecen ese trabajo sin tener Anatomía aprobada. Era un desastre porque nosotros no sabíamos cuántas dosis administrarle a un paciente o a ciencia cierta, no sabíamos qué tenía ni a qué era alérgico. En la pandemia tuve Prácticas 2, que en definitiva no entendí nada. Era solo leer y ver si te aprobaban. ¿Qué decirte de Transporte Sanitario? Una materia donde se copiaban todos y así aprobaban… Agradezco haberme ido de ahí a tiempo…».
Tampoco faltaron los que ejercitaron la memoria y recordaron el escandaloso «Vacunatorio VIP» que funcionó en el Hospital El Cruce y fue denunciado en exclusiva por Mi Ciudad: «Yo no me olvido que falleció gente de salud, cuando se robaron las vacunas los políticos vip de Florencio Varela», posteó un seguidor.
«Es nuestra obligación como profesionales de la salud, denunciar hechos que pudiesen tener carácter delictuoso o cualquier circunstancia que, según las normas vigentes, pudieran comprometer o impliquen peligro a la salud de la población. No importa el color político ni la dependencia con los imputados.
¿Hablan y escriben libros sobre Ramón Carrillo, pero ponen «falsos médicos» en las ambulancias? En lo personal no pertenezco a ese proyecto de salud; del amiguismo, el contubernio y los negociados. Todas las personas tienen derecho a acceder a una atención sanitaria de calidad e igualitaria. Especialmente los más vulnerables, quienes pueden ser víctimas de políticas que agravan la marginación y dificultan más aún el acceso a servicios de prevención y atención», agregó Arellano, el denunciante al que su revelación le costó su expulsión del «Foro Popular de Salud».
El caso de los «falsos médicos» al que las autoridades quieren tapar con su silencio, recién empieza a hacer ruido.