INSEGURIDAD CRECIENTE EN FLORENCIO VARELA

Tierra de nadie



Sociedad » 01/07/2024

Violentas entraderas en el centro de la ciudad y a metros de la Municipalidad, sujetos que ingresan a jardines de infantes y escuelas no sólo para llevarse computadoras y todo lo posible, sino causando enormes destrozos...

Violentas entraderas en el centro de la ciudad y a metros de la Municipalidad, sujetos que ingresan a jardines de infantes y escuelas no sólo para llevarse computadoras y todo lo posible, sino causando enormes destrozos, feroces tiroteos entre bandas narco, robos de autos a la vuelta de la Comisaría Primera, extraños que se meten para robar a plena luz del día en un edificio torre, muy pocos policías en las calles -y otros tomando mate durante horas dentro de algunos comercios- robos de cables telefónicos y de luminarias en todos los barrios y vecinos que suben a las redes videos mostrando cómo ladrones de celulares corren y atacan a sus víctimas en escenas dignas de una película de acción, son lamentablemente episodios cada día más comunes en Florencio Varela, que ya no es aquel pueblo apacible que vivieron nuestros padres o nosotros mismos hace no tanto tiempo.
Todo ello contrasta con la publicidad oficialista sobre seguridad, que hace permanente ostentación de sus «logros», cuando merced al promocionado «anillo digital» se intercepta algún automóvil requerido por la justicia -pero que no evita que decenas de vehículos con las patentes adulteradas o directamente sin identificación alguna transiten libremente por todas las calles varelenses- o cuando una de las muy escasas cámaras de la vía pública –según el intendente Watson manifestó a Mi Ciudad, son sólo 524 para todo el distrito- permite detener a un ladrón de poca monta. ¿Cuántas de esas cámaras funcionan en la actualidad? El propio jefe comunal nos dijo en febrero de este año que, por contrato, la empresa prestadora del servicio, garantiza que nunca puede estar funcionando menos del 90 por ciento. Imaginándonos, en un ejercicio de buena voluntad, que lo firmado se está respetando, las que estarán activas serían menos de 500. Demasiado poco para una superficie de 190 kilómetros cuadrados.
Lo más llamativo es que varios de los hechos acontecidos recientemente sucedieron en pleno Centro. Entre ellos, tres entraderas -dos de ellas sobre la calle Alem entre España y Monteagudo, y la restante, en España entre Alem y 9 de Julio- comparten características: en todos los casos los delincuentes actuaron como un grupo comando, rompiendo puertas o ventanas para ingresar a los domicilios, donde golpearon a sus ocupantes inmovilizándolos y torturándolos por varias horas. Las víctimas fueron de los más diferentes espectros, incluyendo desde un abogado hasta una peluquera. En Alem hubo además otro intento de cometer un delito similar, que no llegó a concretarse.
En la última semana, dos casos estremecieron a la comunidad educativa local. Durante el fin de semana largo, desconocidos saquearon el Jardín de Infantes Municipal N° 922, de Villa Hudson, llevándose tablets, un televisor, micrófonos y equipos de audio, y pocos días más tarde, se conoció que la Escuela 8 de El Tropezón sufrió un robo del que costará recuperarse. En el colegio de la zona rural, los ladrones sustrajeron 50 computadoras, televisores, estufas y garrafas.
Claro que la situación no es muy diferente en otros distritos del Conurbano, zona abandonada a su suerte por «el Estado presente» que pregona el gobernador Axel Kicillof, en la que prima la doctrina garantista que asegura impunidad a los delincuentes y desprotege a la gente de bien.

Las redes sociales son el ámbito donde gran cantidad de vecinos manifiestan su descontento con la política de seguridad del intendente Watson. Uno de los ámbitos donde esto se puede observar con gran participación es el Facebook de Mi Ciudad.
«El Señor Intendente debe estar en actos políticos apoyando a Kicillof … Las cámaras del municipio cuando se solicitan por algún acto delictivo nunca funcionan, pero obvio que las de velocidad y semáforos sí que alimentan la recaudación de la Municipalidad para nada. Los policías brillan por su ausencia, los teléfonos no responden, los móviles están donde no deberían. Estamos en total desamparo en Varela, zona liberada. Promesas incumplidas como de costumbre y van cuántas décadas de lo mismo», escribió en nuestro sitio la usuaria Marta Cuberli.
Por su parte, el doctor Gustavo Bódega manifestó: «Las cámaras del Municipio no se sabe para qué están! No sirven para nada... Ni para prevenir el delito ni para seguir a los delincuentes una vez el hecho consumado. Lo mismo le cabe a la policía y a la guardia comunal. Desde hace tiempo el centro de Varela es zona liberada. Robos en la calle, arrebatadores, robos de autos, entraderas, robos de luminarias...Varela cambia para peor y la inseguridad sigue creciendo. ¿Respuestas? ¡Ninguna!».
La docente jubilada Susana Pazos amplió: «En la calle Bourel entre Chacabuco y Dorrego, desvalijaron una casa, hubo un intento de entradera en otra y un intento de robo de moto y bicicleta en un edificio recientemente».
Por su parte, Natalia Amoedo dijo: «Falucho, Urquiza, Castelli, Las Heras, Chacabuco, etc, tierra de nadie! Barrio La Esmeralda lleno de robos! Antes la policía pasaba, hoy brillan por su ausencia!»
Dolores Mussetti agregó: «Es un desastre , se llevan de todo, picaportes, caños del medidor de gas, cables, lamparitas, tulipas, hay arrebatos y entraderas. Todo esto pasa en el centro, no quiero pensar lo que serán los barrios».
Continuando con la opinión de los vecinos, Mario Pebacini dijo: «Es un desastre la inseguridad en Varela. Hay más cámaras para hacernos multas que no están homologadas. Pónganse las pilas, la seguridad está primero, no las foto multas».
Pamela Pérez coincidió: «nadie hace nada, crece día a día la inseguridad y todo el distrito está igual. No tenemos casi nada de patrullaje y las cámaras sirven solo para multas».
La vecina Mirta Bernao dio su visión del tema: «Vivimos con mucha inseguridad. Ya no salimos por miedo a entraderas. Hay asaltos en casas de la zona centro. Nadie da la cara en Municipio ni en Provincia. Jamás vi a estos empleados dando una explicación. Acá no puede intervenir una funcionaria de Nación. Acá se banca el desorden, la inseguridad, la vagancia. Son los que apañan la delincuencia. Le buscan una justificación. Y estamos en la zona Centro. Qué será en los barrios más alejados».
Patri Flores escribió: «En Cabildo y Rio Dulce se necesita un domo ya que asaltan a los chicos que pasan rumbo al colegio, y una luz también en esa esquina».
Jorge Ayala también posteó su opinión: «Hace décadas que viene creciendo la inseguridad y la corrupción política. Y la justicia, bien gracias…».
Otra ex docente, Adriana Roa, dijo: «La inseguridad en Varela es un desastre. En una misma semana robaron en un Jardín y una Escuela y no le importa a nadie. Ni hablar de las entraderas y los motochorros…Tierra de nadie».

Así estamos viviendo en Florencio Varela, abandonados a la buena de Dios, y hundidos en un continuo proceso de degradación desde hace décadas, ante la pasividad de una clase dirigente que sólo se mira el propio ombligo y está más enfocada en sostener su «rosca» y mantener sus privilegios que en brindar soluciones a la gente.


TAMBIÉN PUEDE INTERESARTE