Más de ocho kilos de cocaína de máxima pureza fueron decomisados el miércoles 18 de julio en la Unidad penal 24 de La Capilla.
La droga que pretendía ser ingresada a la cárcel estaba camuflada en cajones de tomates y se descubrió en un control rutinario.
Luego de la denuncia pertinente, se estableció que la droga fue llevada hasta allí en ocho panes colocados en varios de los 38 cajones de tomates que habitualmente el proveedor de verduras lleva aunque no se sabe a ciencia cierta si la cárcel era el destino o simplemente se trató de una equivocación, asunto que se sigue investigando.