Según informó la Jefatura Departamental de Policía local, gracias a una investigación en forma conjunta con la Subdelegación de la DDI del distrito, se logró desbaratar una banda de delincuentes que se dedicaba a entrar de manera violenta a robar a las propiedades de los vecinos.
Tras cinco allanamientos realizados en el barrio Santa Rosa, la policía finalmente logró la detención de cinco hombres, entre ellos un menor de edad, acusados de ser los autores de “entraderas” en Florencio Varela.
El asesinato del contador Sebastián Calvi el 28 de octubre pasado sigue sin ser resuelto. Su esposa, Gabriela Bossi, y sus hijas, continúan esperando que alguien les diga quién es el responsable de haber destrozado a su familia.
El brutal hecho conmovió a la comunidad varelense, últimamente habituada a padecer episodios policiales a toda hora y con diferentes escalas de violencia, pero sintiéndose cada día más desprotegida.
Arrebatos de motochorros a toda hora, robos en los que se tiran abajo puertas y se arrancan rejas como una impunidad alarmante, hurtos de ruedas de vehículos estacionados a una cuadra de la Comisaría Primera, y muertes que nunca se aclaran, conforman un panorama desolador, que la Comuna intenta disimular anunciando la incorporación de más patrulleros, que está visto, no alcanzan para detener la ola delictiva.
El 4 de noviembre, a través de una r&aac...
Por Alejandro César Suárez | @alecesarsuarez
No hay novedades a más de un mes del asesinato de Sebastián Calvi. Su esposa Gabriela Bossi y su hija Florencia hablaron para Mi Ciudad: «nos prometieron muchas cosas, pero las únicas que estamos encerradas somos nosotras».
La burocracia y la inoperancia de las autoridades comunales impiden que los restos del recordado e ilustre vecino puedan ser sepultados en la bóveda que su familia tiene en el cementerio local.
Sospechan de la policía, mientras que la investigación avanza lentamente.