Por Carlos Straub
Vecina del Cruce Varela, Carolina Denise Perez (46), asesora legal de profesión, tenía una vida normal en su trabajo y criando a su hija hasta que el destino le cambió los planes.
Vecina del Cruce Varela, Carolina Denise Perez (46), asesora legal de profesión, tenía una vida normal en su trabajo y criando a su hija hasta que el destino le cambió los planes. Pero no bajó los brazos, aunque precisa de la ayuda y la solidaridad de la gente. Mi Ciudad dialogó con ella en su casa, rodeada de sus mascotas y el cariño de los suyos.
-¿Cómo fue que en poco tiempo sufriste la amputación de tus piernas?
-Soy diabética desde los seis años, insulinodependiente y en 2022 me fracturé el pie derecho. No conseguía ningún profesional que me quisiera tratar ya que tenía encima 40 años de diabetes hasta que fui al Hospital de Clínicas. Me empezaron a tratar pero la cuestión es que por una cosa y por otra el pie se infectó desde adentro y no hubo forma de que mejore, así que me amputaron la pierna completa en abril.
-¿Cuánto estuviste internada?
-De enero a marzo y en abril sufrí la amputación.
-¿Y cómo seguiste?
-En shock, hasta que se me infectó el pie izquierdo y tampoco mejoraba. La solución fue la amputación del pie y la pierna en noviembre. Hace un año y un mes. No hubo caso, estuve con tratamientos con antibióticos muy fuertes pero no respondía a nada lamentablemente. Hasta me agarraron dos shocks sépticos, que traducido son fallos multiorgánicos… Estuve muerta literalmente, colapsaron los pulmones, tuve un paro cardíaco y pasé un mes entero en terapia intensiva. Hasta que salí de alta de ese hospital tan maravilloso que es el Clínicas.
-¿Cómo es tu vida ahora?
-Muy distinta. Estuve todo el 2023 sin trabajar y los ahorros me duraron poco tiempo y como es de suponer tengo que hacer modificaciones en mi casa, el baño, la cocina… Me mudé para siempre a la planta baja ya que no puedo subir las escaleras hacia las habitaciones, me muevo gracias a esta hermosa silla de ruedas que me donó el Rotary y sigo criando a mi hija que tiene 15 años y gracias a Dios el padre de mi hija se mudó a casa y me da también una mano muy grande.
-Y tenés el apoyo de las amigas…
-Sí, ellas son las que están desde el primer día y comenzaron a hacer colectas. Están buscando la forma de juntar dinero, incluso tengo una amiga en Estados Unidos y se puso a hacer una colecta para comprar las prótesis que salen 3500 dólares cada una. Son 7000 dólares en total, no es mucho pero ahora, es mucho. También la idea es comprar una silla de ruedas con motor que allá en Norteamérica se ven mucho y prácticamente parecen un scooter. Y mientras acá las chicas, muchas amigas que me quedaron del colegio secundario Sagrado Corazón, me dan una mano inmensa para comprar remedios, insumos y juntamos para hacer las modificaciones en la cocina y el baño.
-¿Dónde se te puede ayudar?
-Básicamente en Facebook: El mío es Carolina Denise Pérez y el de mi amiga que organiza todo, Gabriela Zepidi. Mucha gente se juntó para ayudarme y estoy muy agradecida a todos, por nombrarte a algunas de las chicas, Mariana Pérez, Noelia Sosa, Bettina Galassi, Silvana Ghio… Me voy a poner a llorar de nombrarlas pero son de muchísima ayuda en estos momentos.
-Te están dando un gran apoyo…
-Sí y no sólo a nivel económico sino a nivel emocional. Hago un tratamiento psicológico desde el día uno, pero ellas están al pie del cañón.
-¿Cómo enfrenta una persona la amputación de las dos piernas?
-Cada persona es un mundo pero te puedo decir que es muy complicado. Cuando te lo dicen quedás en shock y después viene un bajón fuerte, tanto que yo todavía no lo terminé de procesar pero con lo que tiene que ver con las limitaciones físicas, lo enfrento y lo supero. Es un día a día. Al comienzo no podía subirme a la cama, y ahora sí. No podía sentarme en el inodoro, y ahora puedo. Todo se puede, nunca pero nunca hay que bajar los brazos.
Quienes deseen contactarse con Carolina pueden hacerlo al 15-3-863-4404.